lunes, 31 de diciembre de 2012

Así Debe Sentirse


Eso que hoy está creciendo de a poco, eso que suena como a risas, eso que está aún buscando palabras, eso que no se cambia por nada, eso que tiene cubierta de chocolate y chantillí con milo, eso que habla en argentino, eso que aguanta madrugadas, eso que canta poemas… Eso tiene nombre propio.



Amar, amar, amar; y hacerlo desenfrenadamente. Tener besos y abrazos que se quedan en mí todo el día dibujando sonrisas que todos tratan de entender pero nadie logra hacerlo. Cuánta felicidad puede caber en dos palabras… Mucha tal vez, tanta que no puede ni mencionarse cuando se está hablando de lo que estoy hablando y mucho menos cuando se está sintiendo lo que yo estoy sintiendo.



Lo irrealizable no solo se ha vuelto posible, se ha vuelto más sencillo, más de lo que yo pudiese haber imaginado, supongo que tenerte es algo así como una realidad perfecta, perfecta como es, o más bien, como somos. Así, siendo exactamente así, me has hecho vivir y revivir los momentos más hermosos que mi memoria puede guardar, y ahora están en mí, así como tú, sin poderse ir nunca y recordándome a cada segundo que tengo todavía muchos “te amo” guardados para darte y muchas ocasiones reservadas para besarte.

Déjame ser lo que no sea en ningún otro lado, déjame descargar en ti abrazos que no tengan que ver con lo bueno o con lo malo, que no tengan que ver con nada, déjame acariciarte y no cansarme, como siempre.
Los recientes días, tan esperados como fueron,  no me han dejado más que ojos brillantes, la inmensa fortuna de haberte tenido y las gracias que voy a darte... Por darme cosas sencillas que no tengo que entender, cosas que tan solo puedo amar, por todos los momentos sin silencio y por los recuerdos, desde los que más se parecen a mí hasta los que más se parecen a ti, por amarme y demostrarlo, y es que es bonito todos los días saberlo, pero nada es más bonito que recordarlo. Gracias por no salir de mi mente, porque ¿sabes? Ella, sin falta, te escribe todos los días.

No es difícil pensarte y empezar a crear paisajes soleados con mucho viento, o noches oscuras con una luna brillante y muchas estrellas (de esas que son para pasarlas contigo), es tan fácil y tan increíblemente feliz suspirar pensándote y querer estar a tu lado, es esa tal vez la razón más grande por la que podría agradecerte… Y agradecerte y agradecerte y agradecerte. Así debe sentirse terminar un año muy enamorada.


Miradas



Se necesitan a veces miradas, miradas largas que no pidan más que ojos brillantes que se encuentren a sí mismos en el reflejo de otros ojos, de otras almas; que no entiendan de molestias, enojos o aburrimientos; que hablen ¡Que griten en palabras que no existan! Que no sean comprendidas más que por quienes a los que son dirigidas.

De vez en cuando me dan ganas de tener una mirada, una de aquellas, que me lleve al cielo y de vuelta y me quite todas las fuerzas, que sea tan diciente que ni siquiera un montón de letras juntas pudiera hablar la mitad de lo que ella hablara, pudiera amar la mitad de lo que ella amara, pudiera significar la mitad de lo que ella significara; que sea inexplicable y no necesite ruido ni luz.

El instante de mirar es el más maravilloso trance; apacible, indescriptible, casi quimérico, con tímidas lágrimas que no lloran de felicidad sino de alguna cosa sin nombre que es sólo razonable sin palabras, es sólo razonable con miradas.

Miradas que todavía no saben mirar bien y así miran mejor que ninguna, que acercan las caras y que buscan brazos calurosos y sonrisas medio hechas. Miradas que no buscan sólo gustar sino mover todo por dentro y hacer un caos en la mente, sí, un completo desastre, tan desordenado que da risa porque no se entiende ni se quiere entender nada, sólo importa la detención de esas, las miradas.

Quiero una de esas, que lleguen cuando menos se necesitan y cuando más se ansían, que ambienten momentos oscuros, largos muy largos, en los que no hay necesidad de ningún sonido, ningún movimiento, sólo parpadeos que parecen eternidades antes de volver a ver esos ojos, esos que con una simple, profundísima mirada, enamoran.

Por qué no me miras y le quitas a la noche sus horas, minutos y segundos, dame un beso con la mirada y con el silencio, acaríciame los sentimientos, déjame mirar tu mirada. Mira, Mira, Mírame.

domingo, 25 de noviembre de 2012

Diálogos Con La Ventana VI



Querida oyente de incoherencias, hace un tiempo no nos veíamos de la manera en que solemos hacerlo. Hoy me siento como si me hubieran robado palabras que son imposibles de remplazar y admiro cómo ya fue encontrado lo que yo quise decir pero al fin difiero al menos mínimamente, para qué dejar opciones si todas son penosas. No, de esa manera no vale la pena, no para mí. Dejan de ser dos y empieza a ser uno.

Mi mente se ahoga con tanta sensación efímera y cambiante, el vaivén me marea cuando yo lo único que quiero es que me canten una canción que relate una historia que no tenga nada que ver con la vida. De esas que llenan los momentos en los que la cabeza no necesita nada más que dos sonrisas y tres o cuatro minutos. Y pensar que para mí esa sinrazón resulta tan afable, la tontería tan inteligente.


Me pregunto cuántas cosas de mí no se ven y cuánta falta hacen, será que dejé de ser sin querer o fui pero no del todo. Partí y dejé a un montón de palabras informales sustituyéndome y ahora me cuestiono mientras observo todas las formas, tan distintas, en que fueron entendidas.

Soy fuera y soy dentro también. Soy lo que se espera y lo que no a la vez. Redundante pero no colmada de mi propia personalidad, no soy tortuosamente incomprendida. Soy algo así como un día evasivo en la mitad de una poesía barata. Con mis noches convertidas en madrugadas oscuras que no dan paso a lo que no sea solitario. Una mente y un pensamiento que se escriben solos, nada más.

Puedo pasar mis manos por las letras y sentirlas viejas, pero es que no hablo de esto sino de lo otro, hablo de que quiero convertirme en pausas y ser parte de una de las dos páginas que estaban acostumbradas a estar abiertas. Supongo que más de la mitad de lo que quería decir es que me muero por leer letras y estar detrás de ellas; por simple, vano y puro placer.

Mis palabras se acomodaron a mis épocas ventana, y creo que de todo, fue eso lo único que pasó sin que yo tuviese intención de que pasara. Tal vez nos cambiaron las razones para estar tranquilos y la profundidad nos tomó por sorpresa, tal vez poco entendemos de idilios y de explicaciones, que ya no sufrimos de ser esquivos ni de despelotes interiores ni de verdades calladas.

Valentía… Valentía déjame pensando. Pensando y también recordando, como si pudiese sentirme allí y no en las vueltas que no dejo de dar.

Aquí quedé, punto de quiebra. Hecha un monumento a la cobardía, fundando sentimientos que no sabía que podía despertar. Con la realidad en frente y con mis manos incapaces de hacer el más mínimo movimiento, con mis pies pegados al piso y mi mente pegada a un enredo.

Víctima de las respuestas silenciadas, tan capaces de dejar a cualquiera indefenso de repente, como a mí, parada como estoy, en mi mundo y en el tuyo o en el de nosotros, pensando en actuar como necesito actuar, mostrando algo coherente con lo que en mis adentros sostengo. Entiendo tan bien algunas cosas que desespero terriblemente por dejarlas todas al revés y vivir en un momento en el que nada tenga que hablarse… Pero un nudo en la garganta no es el mejor amigo ni de las palabras que no se dicen.

Anda y cuéntales que yo también lo siento, tanto o más, tan incomprensible e indescifrable como suena. Anda y conversa por un rato para hacerme creer que todo pasó y así sorprenderme cuando mis ojos se vuelvan a nublar.

Si algo aún queda sólo espero que me cuenten qué puedo hacer para que no se vaya. Yo ya no sé nada ventana, parece que me estoy cansando de pensar pero no lo voy a dejar de hacer, antes de eso dejaría de ser yo…

En todo caso te extrañaba. ¡Y no agaches la cabeza orgullosa que sé que tú también me extrañabas a mí! Pero ahora me voy de nuevo, porque no han podido gustarme enteramente todas estas palabras.

jueves, 27 de septiembre de 2012

Muchas Sonrisas, Por Favor

Muchas cosas pueden llegar al alma,  sencillas y complejas es difícil entenderlas a todas. A tu alma pueden caberle muchas cosas, como ahora sucede, me atrevo a decir. Y yo te miro y te oigo un poco desde lejos, con un rastro de silencio detrás de tus comentarios que se interrumpen solos y ahondan en ideas indescifrables. A ver si a tu alma le puedo regalar una que otra cosita en esta ocasión.
¡Muchas sonrisas, por favor!
Me afanaré hoy por conseguirlo; lo intentaré, aclaro. Empezaré quizás con un abrazo o dos, muy muy fuertes y largos, pero de cualquier modo ellos estarán siempre allí, por si lo olvidabas, aunque no sería una mala idea llevarlos conmigo por si acaso. Empezaré quizás con una caricia rápida o una risa aparentemente falsa, algo ligero que no haga mucho alboroto.
¿Sabías que tu risa suena de muchas maneras? Sí, una para reconfortar cada sentimiento que siento yo, hay algunas para el día, otras para la noche, unas para las tardes de domingo y otras para los fugaces minutos semanales, tantas y tan dulces maneras que sólo dejan una emoción indescriptible en lo más recóndito.
Pondré una dosis de tranquilidad en tu mente, en donde por un ligero momento no existan ni tobillos ni columnas ni vértigos ni exámenes ni textos… Ni mucho menos crisis económica.
Y mandaré a tocar mil instrumentos de esos bonitos y mandaré a cantar mil canciones de esas sin razones, nada que tenga que gustarte, sólo algo alegre que ilumine un poquito más tus ojos, y que una vez terminada tal tarea, me mires y sonrías, y con tu mirada calles a todas las palabras que se están muriendo por ser dichas.
Me adentraré despacio por pequeñas cavidades que den tan solo lugar a mi voz, soltaré suavemente un murmuro que grite “Te quiero” (…Te quiero tanto que te amo) ¡Y  sin peros voy a sacar una sonrisa de tu cara! Una de tantas que alegran mi alma y hacen que mi corazón salte ridículamente. ¡Ahí está! Petitoria satisfecha.
Y si nada de esto sirve (corro el riesgo)… ¡Y bueeh! ¿Qui Quirij Qui Te Diga? ¡Se hizo el intento!
Yo sólo quisiera que recuerdes que tu alma da mucha vida a otras almas y que no hay nada mejor que sentir alivio cuando en medio de la zozobra estás tú y pareciese como si para un momento perfecto no hiciera falta nada más, aseguro que no es una sensación mía solamente, eres totalmente imprescindible a la hora de ser feliz, y es demasiada fortuna el devolverte algo de esa vida que a diario regalas.
Cuando ese no sé qué haga estragos y tus conmociones sean más grandes que tú y otros tantos tú, exclama mi nombre, que ahí puntualmente estaré para que me pidas:
“¡Muchas sonrisas, por favor!”


miércoles, 15 de agosto de 2012

La Displicencia De La Nada

La pelea de los sentidos, la confusión de los adentros, la protesta de los labios cerrados, la inexpresividad de lo expresivo, la soledad de las corazonadas.

Las letras que se necesitan y las palabras que sobran, el rechazo a las preguntas incuestionables o tal vez la ignorancia de las pretensiones decorosas. La atmósfera grisácea, la impotencia de las humildes voluntades.

La maldita muletilla que aparece cada vez que se acrecienta la quebradura, ambientada por las historias de días absurdos y por pensamientos que a la tranquilidad le resultan superfluos.

El incesante pero tardío correr lento de los minutos, la intensidad de las percepciones, la introspección recóndita y absoluta que converge en distancias tan agonizantes.

La vicisitud y la monotonía, la displicencia de la nada.

El silencio es la mayor distopía, instaurada por la caótica fortuna que se obstina en relatar la delgada línea, la cualidad de lo eterno y las ya conocidas, distracciones insuficientes.



jueves, 5 de julio de 2012

Yo Te He Nombrado Reina






(De Pablo Neruda)



Yo te he nombrado reina
Hay más altas que tú, más altas.
Hay más puras que tú, más puras.
Hay más bellas que tú, más bellas.
Pero tú eres la reina.

Cuando vas por las calles nadie te reconoce.
Nadie ve tu corona de cristal, nadie mira
la alfombra de oro rojo
que pisas donde pasas,
la alfombra que no existe.

Y cuando asomas
suenan todos los ríos
en mi cuerpo, sacuden
el cielo las campanas,
y un himno llena el mundo.

Sólo tú y yo,
sólo tú y yo, amor mío,
lo escuchamos.

miércoles, 20 de junio de 2012

Así De Simple... No Tan Simple



Amor que escribe tu nombre como si quisiese guardarlo en cualquier lugar en el que no pueda nunca perderse. Amor que es compañía del tiempo, que desearía ganarse un millón de palabras y hablar sin medida alguna pero no, de esa manera tampoco sería suficiente, podría entonces pedirle a la vida que haga de la eternidad una extensión insuficiente para hacerte saber cuánto te amo desde el momento en que lograste hacerte dueño de mis más verdaderas sonrisas


Sólo quiero tenerte a mi lado y adorarte, de forma tan tranquila como siempre, descansar en tu sueño y dormir sonriendo, despertar sonriendo, vivir sonriendo, custodiada por dos palabras tan pequeñas y tan extensas que son dignas de redactar una sonrisa… O un suspiro.


Es éste el punto en que finalizan mis letras y no sé por cuánto tiempo habitaré este enamorado paraje, pero aquí me mantendré, en donde amarte es mi realidad, la más difícil de explicar.

Cuánto me falta todavía pero cuánto confío en las miradas, ansío que siempre cumplan con decir todo aquello que mi corazón, o cualquier otro espacio que esté a punto de enloquecer de amor, quiera dejar salir.

Te Amo.

Diálogos Con La Ventana V








Ni siquiera puedo a ti hablarte, puedo estar sentada por horas y hundirme en un silencio, de esos tan reales que se retuercen con el viento para entrar en el más pequeño espacio vacío, acostarme a tu lado acompañada de las mismas deducciones y volver al mismo punto en que tantas cosas pasan y yo me doy cuenta, sí, pero las dejo ir.




Tanto tiempo buscando en donde nada hubiese podido encontrar, tanto tiempo ignorando que una vez las cosas cambian el tiempo se vuelve un enemigo, decoroso y prudente, pero enemigo al final. La felicidad da saltos entre abismos inexplorados y nosotras nos quedamos aquí, observándola con el férvido anhelo de no verla caer.




Podría contarte historias de lágrimas, de arrebatos, de esperanzas y locuras, podría tan sólo imaginarme junto a ti días distintos que no hagan caso a la normalidad de las confusiones confundidas, podría hablar y no decir nada; podría decirte tantas cosas que no te voy a decir.




En el momento en que apenas nace la noche, en los días en que la luna ha dejado de salir mejor me quedo contigo ventana, tú que te conformas con mis miradas perdidas y no haces preguntas mientras yo me ocupo en la misma actividad, escribiendo con mi cabeza y no con mis manos.

martes, 29 de mayo de 2012

Temporalmente Permanente

Líneas perdidas cubiertas por nada, extraviadas en alguna parte a punto de desvanecerse y desteñirse. Soluciones temporales a suspiros impotentes. Versos por aquí, por allá y por ningún lado.

Gritando mis palabras con la boca cerrada, en un escenario vacío. Ellas, tan mías, tan propias, tan difíciles de usurpar; reposan a mi lado, verdaderas, fieles a mis entelequias y mis abstracciones que ahí todavía permanecerán en el momento en que ya deba amanecer.

Es un ser que se hace promesas difíciles de cumplir, de esas que se escuchan lentas en días de horas rápidas en los que cerrar los ojos es sólo para darle un poco de coherencia al sinfín de puntos ahogados que recorren la misma canción. Y así va, de ocho en ocho desahogándose con erratas de tercer círculo.

Nada ha sido dicho entonces, se ha escondido casi todo en el tiempo, en lo que en las últimas muchas horas se ha quedado atrapado en la voz sostenida... O en los diálogos con otra ventana.

Y es lo que hoy se entrevé en mis pensamientos, que tantas letras plantadas en una angustiosa espera se quedarán buscando compañeras que las liberen de tanta presión absurda.

Se apagan poco a poco tantas imaginaciones guiadas por notas permanentes, es el ritmo de la corriente el que sigue arrastrando los días sin ninguna primicia.


martes, 15 de mayo de 2012

Frases De Burbujas De Jabón




(De Julian Heun)



Lento de sentido, pero ágil con la lengua
Quemadas las puntas del bigote
Depresivo, eso sí, pero ignorado
Y elevado a lo alto una mano
Desnudo, si no fuera por su vestido de lengua
Está sentado al borde de la calle en Berlín
Un Filósofo.


Sumerge, desesperado y desequilibrado,
La cabeza en la ciudad y escucha:

El constructo de la ciudad corre tintineando
Lleno de centellear loco y aleteo de voces
La tierra principal del ser humano
Está lleno con ruido, del corazón hasta las verjas.

Transeúntes flotan, numerosos, nadan
Alrededor del filósofo
Y todos, todas sus voces confusas
Suenan fuerte, horrendamente vacíos.

Las bocas de los multidumbres regañan ávidamente
Constantemente babean papilla de discurso
Saliva impregna los aires, untuoso
Pero nada, nada resulta.

Las cascadas de palabras dan saltos,
Espumean con bramido
Y hasta si uno quisiera intentarlo
No le encontraría mucho sentido.

¡Porque palabras son solamente legumbres!
Causan flatulencia,
Zumbean sin sentido por los aires
Raspando constantemente, sin parar.

Y todas estas frases sin contenido
De las bocas en las días actuales
Quieren hablar, pero no decir nada,
Quieren hablar, hablar, hablar, hablar
Hablar
Y no decir nada.

Y soplan frases grandes como burbujas,
Soplan frases de burbujas de jabón,
Más grande que todas las medidas.



Sí, bueno, aeh, pues voy a decir, que alguien como el Michael Ballack, es un súper, aeh, alguien, quien, cuando, bueno uno dice, vos Michael, entonces…

HABLAR Y NO DECIR NADA

A veces también hay que ir de juerga y no solamente así daedoe, daedoe, sino también a veces bien hecho. Es que uno también tiene voz, también es humano, sí o no.

HABLAR Y NO DECIR NADA

Pues yo digo, cuando uno lo mira todo un poco, como es y no como alguien dice- haga eso, hagan esto, hagan yo-no-sé-que, entonces eso no es correcto, cosa dura es eso.

HABLAR Y NO DECIR NADA

De dónde es? - Oh, Berlín, me encanta!
De dónde es? - Oh, Berlín, me encanta!
De dónde es? - Oh, Berlín, me encanta!

HABLAR Y NO DECIR NADA

Escúchame, la vida, no es una fiesta, Es duro contra duro, No es lala lala falara,

HABLAR Y NO DECIR NADA

Y siempre estos chefs
Solamente chefs, que

HABLAR Y NO DECIR NADA

Cuando, en la estación de Múnich, con 10 minutos, sin, que tenga que hacer check-in, entonces prácticamente comienza en el aeropuerto, en, en la estación de Múnich su vuelo, prácticamente puede.

HABLAR Y NO DECIR NADA

Tensamente rellenado con gases de frases
Van los frases de burbujas de jabón, a toda velocidad por el mundo.



Lento de sentido, pero ágil con la lengua
Quemadas las puntas del bigote
Depresivo, eso sí, pero ignorado
Y elevado a lo alto una mano
Desnudo, si no fuera por su vestido de lengua
Está sentado al borde de la calle en Berlín
Todavía
Un Filósofo.

Pero en la mano del filósofo
Permanece, durante de las ultimas estrofas
Una aguja.
El filosofo mira las frases de burbujas de jabón y hace
(PPP)
Y se vuelve silencioso En Berlín.


lunes, 30 de abril de 2012

Otra Acumulación De Palabras

Y de tanto buscar palabras me quedé sin ellas, ahora lo único que hago es esforzarme sin resultados en traducir las sensaciones de mi interior, sería capaz de quedarme sentada mil horas pensando en la forma correcta de regalarte mis emociones pero lo único que saldría de mí serían esas dos palabras que someten día a día a un corazón enamorado. Que nada sea dicho entonces, si sólo me queda sentir.

Sentir ganas de que me acompañes en una noche como ésta, como ésta y como cualquier otra, ganas de que la luz del día se refleje para mí en tus ojos, de no tener escapatoria y poder dormir tan plácidamente sólo porque sé que amanecerá y existiré sólo si estoy a tu lado.

Sentir seguridad con tu cercanía, querer darte en una acción todo aquello tan sublime que tú me das a mí. Queriendo que dentro de mí permanezca lo que estoy sintiendo, siempre recordándome que voy día a día por un objetivo, ahuyentar tu dolor, calmar tu cansancio y hacer sonreír a tu corazón.

Sentir desconsuelo porque la vida insiste en obligarme a conformarme con la perfección, cuando sé indisputablemente que tú puedes hacerme alcanzar algo superior, porque con un ayer, un ahora o un mañana me haces sonreír, de una manera tan falsamente falsa que resulta sin duda verdaderamente verdadera.

Sentir que me haces falta. Cuando no estás me haces falta. Pero la vida y sus ya usuales extrañas maneras hacen que te ame si estás lejos, si estás a kilómetros nada cambia, todo en cambio se hace más grande .

Sentir que llego al punto de declarar tanto discurso repetido y no encontrar ya oraciones con sentido que me hagan dejar de rondar en la misma idea, pero es que este sentimiento desesperado no cesa de luchar contra las restricciones, más palabras hacen más grande mi deseo de volver a decirlas por saber que puedo darle tantos nombres a lo que simplemente no tiene, a lo que puedo llamar amor, sentir como perfección y vivir como felicidad.

Así que pido perdón por una nueva acumulación de palabras perdidas que se desahogan en una simple redacción, palabras que irrelevantes pueden resultar pero que sin cansarse luchan por ser dichas y salir del encierro de mis caprichosas sensibilidades, aunque sea para manifestarse en letras gastadas. Tarde o temprano saltarán fuera otra vez y yo estaré aún donde estoy en este momento, caminando en círculos enfrentada a la realidad desconocida de usar todas y cada una de las partes de mi ser sólo para hacer una cosa: Amar.

lunes, 23 de abril de 2012

De Confesiones Y Emociones




Tan inimaginablemente repentino. Sin buscar nada, con sólo risas y confidencias de madrugada, así he querido, así he entregado mis omniscientes sentidos, hoy poco a poco se va dibujando en mí una sonrisa, porque todo se hace tan real, hoy quererte es suficiente.


Y después de tenerte, ya nada puede borrar el encanto de un beso, si con un primero me haces amarte, con un segundo me haces entender que todo trasciende, que nada se queda en las visiones ingenuas que construyes y derrumbas para después, con un tercero, volver a hacerme soñar.


Sé que te amo cuando cambia el significado de tantas palabras, cuando descubro tantas cosas nuevas en lo que siempre tuve en frente, cuando mi mente no deja de hacerte su primer y último pensamiento, cuando mis manos sólo te añoran a ti cuando empiezan a escribir.


Después, llegan tus palabras, el sonido de tu voz sincera que me hace encontrar respuesta en lo vacío, lo prolijo, lo que de mí ya no espera esfuerzo, es ahí, justo en ese momento en que tus gestos y miradas en eterna compañía de tus frases hacen de mí alma perfeccionada, que se abandona sin protestas en la tranquilidad de tener tan dentro tus versos. He de decirte yo mis verdades para que con amor las llenes y las conviertas en reflejo de tu confianza.


Quiero volver a mí porque no me he abandonado, porque decir “siempre” lleva a mis instintos a días de expresiones infalibles, de risas sin razón, decir siempre me lleva a ti, como siempre, tu soporte, siempre, con tu mirada descansando imprevistamente sobre la mía.


Terminas, en tu abrazo resumes todo cuanto necesito. No puedo atreverme a hacer morir estas líneas sin agradecer una nueva vida colmada de sentimiento; una nueva vida, un nuevo día, en el que espero ansiosamente encontrarme con tu sonrisa. Gracias, gracias y gracias de nuevo, por si corro peligro de que no quede lo suficientemente claro.


¡Y pensar que fue sólo cuestión de imaginarte!


Y si pudiera besarte todo el día, sé que no me arrepentiría de tomar la decisión de juntar tu vida con la mía.

jueves, 19 de abril de 2012

Escrito Decimonónico




Amor que se ríe de quien pueda tomarlo en vano, hace docilidad de cada pensamiento, de cada irremediable curva en las comisuras de mis labios.

Sin esfuerzo, con las palabras que poco a poco irán llegando a mi alcance, así digo cuán grande es esto, esto que hace que tanto acontezca por dentro, corre, salta, se acelera, grita, y por fuera... por fuera sólo se escucha un suspiro, tan silenciosamente expresivo. Tanto, tanto… Tanto, tantísimo.

Ahí estás, así, de forma tan perfecta y tan adecuada a mis maneras, alcanzas los sentidos ansiosos de escucharte y que en sueños a ti vuelven, sabiendo tu olor cerca, siempre, como la más apacible e inigualable compañía, que se guía por unos ojos que no ven sino que sienten, que se enamoran y en el sentir se pierden.

Diría tanto más, pero ya no sé, no sé nada en este momento, de un día a otro me hallé irremediablemente perdida en unos brazos tan conocidos, ni siquiera sé si he vuelto, no me he esforzado en buscar la salida, no pretendo alguna vez hacerlo. Ésa es ahora mi respuesta.

Amor que sin preguntar ama, que llena, llena la vida entera.


sábado, 7 de abril de 2012

Bandera Blanca Al Corazón

De nuevo llega ese no sé qué que siempre me llama a escribir, ese que ahora ha decidido dominar mi corazón mientras éste busca sin cesar todas las palabras que el amor pone dentro de mí.

Te alejas para dejarme extrañarte pero de un momento a otro me sorprendo sabiéndote aún tan cerca de mí, siendo mi mejor pensamiento, dándome tu ya conocida fuerza, la única que logra que un sentimiento se cruce con otro y que de ésa fusión nazca una sonrisa, tu fuerza que logra hacer felicidad de los momentos de decadencia, tu fuerza que sin saberlo, tanto ha acompañado mis recientes días.


Y mi mente absorta en preocupaciones no te olvida, no me canso de sentirte, no me canso de pensarte, no me canso de cerrar los ojos para verte y ver tanta vida que me has hecho sentir y es que ésta tranquilidad es apta para todo delirio.

Mi espera se hace más corta, mi amor se hace más grande. Y me sigues encantando luna, y sigo amando desmesuradamente… Con todo mi corazón.


viernes, 6 de abril de 2012

El Primero De Muchos

Y sin esperarlo, me regalaron las palabras que llenarían ésta, la creación del primero, hay buenas noticias que en este momento se encuentran a la espera de compañía, pero el temor no ha ido a esconderse, las nubes grises también hacen parte del paisaje.

La rueda agita los charcos con decisión, la alucinante causa que mantuvo mis ojos abiertos no me dejó perder el tiempo y el ritmo, la humedad y el viento se hicieron responsables de la tan anhelada serenidad.

Pero como disparo, sin aviso, se rompió el fino hilo que separaba dos realidades de intensas conmociones y el tiempo otra vez corrió frenando, pasando por terreno empantanado y tú sigues, intimidas al verde y a las alturas que por fin encontraron su lugar entre éstas letras. El frío congela aún más.

Y así se cumplen las profecías del corazón en decadencia, el silencio a veces aturde.

Pero ahora, supongo que una segunda oportunidad no es una mala idea, así que la música sigue sonando, que nos deja seguir asimilando los sucesos, que nos recuerda que nacimos tan libres como el cauce del río que corre con fiereza junto a nosotros.

“Yo una vez estuve aquí”… Si devolverse en el tiempo es lo necesario para arreglar esos sonidos previamente escuchados, pues que los latidos se preparen, que nos iremos a encontrar con historias de rocolas y cantinas.

Bonito… Ya veremos cuando sea la hora en que se quemen las estrellas y caigan cerca al que al presente es nuestro suelo.

jueves, 5 de abril de 2012

Recuerdos Bernardinos

Un abanico resignado, destinado a que lo sostengan firmemente las manos de una vida llena de afliges, tus manos, que como cada parte tuya tanto tuvieron que aguantar. Pero ya no, te deslizaste de mis días cuando yo más quería que tu sensibilidad los llenase; aunque nadie lo crea. Me río si crees que no te recuerdo.




Te pediría que no mientas, yo te conozco, pero ahora cuando tus pasos van tan lejos no puedo ni siquiera percibir el sentir de tus rasgos expertos en escondite y acritud, así que ninguna otra alternativa me queda más que obligar a mi memoria a que sea mi única compañera y me deje recrear los cuadros, tal vez enmarcados con acero, de aquellos días que pasé en tu casa.




Me dueles Bernarda, me duele tu ausencia forzada, me duele que te hayas ido sin despedirte. Tú, la de frustrados pasos lentos que alejaste el sabor agrio de la primera impresión cuando me dejaste conocerte por dentro. Ahora es mi turno de entender tus palabras y hacerlo como nunca nadie lo hizo, sé que el orgullo no te ha saludado de la manera en que muchos creen, que en sueños caminas de un lado a otro desesperada pero con un ojo abierto, que tus más recientes acciones fueron en contra de tu voluntad, que el pañuelo era más tuyo que de cualquier otra y que aún guardada puedes oír cómo las lágrimas de tus mujeres caen al piso.



Tus botones perfectamente alineados descansan ingenuos a la espera del final de los seis, como tantas otras cosas que en medio del mutis dejaste a tu paso sin dar el gusto a nadie de mirar hacia atrás y recogerlas. Te pertenecían, te pertenecieron sin que te dieras cuenta.
¡Y no pudiste ver morir a tu hija! ¡Y ella te esperaba con palabras que aunque crudas, te iban a dejar verla por dentro y descubrir sus desgarradores sentimientos! Te quedaste sin eso, yo sin letras, sin flamenco. Y por esas pérdidas has causado muchos suspiros Bernarda, no sólo míos, lo aseguro con veracidad.




Ahora ya te fuiste, tal vez por el camino de los segadores, pero no pierdes tiempo y por momentos se te ocurre atacar mi mente y empiezo a divagar entre pensamientos pintados de negro, no lucho por dejar de hacerlo, es mi forma de mantenerte cerca, porque tu nombre está en mí, ya tus emociones están entre las mías.




Bernarda, no me dejas más salida que con placidez repasarte y a la vez preguntarme… Cuándo fue que la vida se aventajó y tus movimientos quedaron dispersos en el aire de una sala pequeña. Si yo no te olvido, te ruego, tú a mí no me olvides.


miércoles, 4 de abril de 2012

Preludio (In Silence)

Así que todo está tomando un solo rumbo. Me encuentro sentada en lo que dentro de unas horas podrá significar la mayor lejanía, una realidad tan provisionalmente distinta. Sin embargo, el asunto pronto deja de tratarse de mí.



Me voy a encontrarme de frente con lo que busqué en los lugares equivocados y espero vehementemente no salir decepcionada ni encontrar de nuevo un corazón tentado a romperse, alguna partícula intrusa del destino me dice que no será así.




Y de a tres partimos y de tres llegamos a uno, para obtener el mismo objetivo que no se puede revelar a ninguno. Y es que no existen las emociones exactas para describir lo que al corazón trastorna. Son dos a la expectativa, uno casi sin vida.




¿Miedo? No, sólo el sentimiento impreciso que poco a poco ha ido invadiendo mis rincones.




Fuime.





Con la esperanza de olvidar por un rato la prevención que dejo descargar sobre mesas, mesas de madera.




Dos suspiros inaudibles y puntos suspensivos. Pausa… Bien está. Habiendo dejado listos mis recuerdos. Habiendo escuchado el más dulce sonido que mi sistema tiene la capacidad de asimilar, me voy, nos vamos.




¡Cuántas cosas como preludio hay por hacer!





martes, 3 de abril de 2012

Escucho El Sonido De Los Latidos De Un Corazón En Decadencia

Si no te anima ni la esperanza del soplo de un nuevo día.


Si yo limpié tu alma pero ésta quedó sucia porque lo que limpié estaba manchado.

Si una lágrima sale de tus ojos pero no sabe en qué razón se guarda. Si la misma lágrima no sabe expresar sus más insondables impotencias.


Si entre mis sonrisas se pierden las tuyas; cuando existen.


Si no hay forma, si ya parece no haber forma.


Si sientes que pronto se difuminarán entre sí y serán iguales día y noche. Si es otro cuerpo el que esa sensación tiene.


Si la serendipia en tu vocablo no existe, ni la esperas, ni la oyes, ni te atreves siquiera a condenarla.


Si tus labores te matan pero te conservan viva.


Si los que quisiste van lejos y en tu vida no hallas otra salida más que la melancolía.

Si caminas con la cabeza gacha, sin sospechar que es ése el mayor miedo de quien te rodea.


Si recuerdas tanto a tus olvidos y los haces funcionar como afilado cuchillo que llega con varias horas de retraso.


Si ya vienes, pero tal vez lo haces de la misma manera.


Si un sueño alejandrino trajo a tu memoria aquello que luchabas por evitar.


¡Si la resignación te ahoga! ¡Si no gritas, ni siquiera hablas, porque la resignación te ahoga!

Si todo esto son sucesos ya una vez contados ¿¡Qué esperas para levantarte y empezar!? Sí, empezar.

domingo, 4 de marzo de 2012

Quédate Un Momento Así

Las sensaciones nacen sin pedir permiso, se escriben a sí mismas. Sin pedir permiso…

Aún, ninguna palabra es dicha en vano, cada una de ellas encuentra su camino propio y se adentra en lo que está siendo poco a poco creado, esa dimensión rara, tan inentendible y tan reconfortante. Así de simple.

Así de simple como declarar que haces perfección de los momentos más normales, tan desprevenido calor acogedor de tus brazos que hace de la monotonía una expresión ficticia, tan lejana a nuestra realidad, que me consume mientras me pierdo en una mirada que alude a la eternidad.

Ahora siento que tendré que inventar palabras, esa parece ser la única respuesta a mi iracundo desespero por plasmar lo que en mí haces surgir, mientras tanto lo siento, tendrás que conformarte con lo que vagamente te doy día a día en una sonrisa.

Y si no te tengo que tu olor me encierre, como si tuviera tus brazos tan cerca y pudiera tomar tus manos, cerrar los ojos y quererte… quererte cada segundo más y que así se vaya la vida, que nos lleve sin siquiera darnos cuenta, que lo que nos importa ahora no es el paso del tiempo sino su detención

Yo sigo aquí escribiendo líneas, escribiéndotelas.






jueves, 23 de febrero de 2012

Diálogos Con La Ventana IV



Tan cómoda aquí. Mejor, tan cómoda en ti. Rodeada de tantas cosas que me estorban, tantas cosas que no son tus brazos. Minutos más, minutos menos, voy descubriéndote, entendiéndote, recorriendo sin saciarme cada rincón de tu cara, ésa de la que no quiero apartar la vista. Y pasado un rato, ya mis manos sin ti se sienten extrañamente perdidas.
Dame un segundo más, ventana, dame un segundo más.
120 después. Sentada. Acompañada del sonido de mis suspiros que sólo encuentran desahogo en ti. No hay mucho remedio, no puedo hacer más que adentrarme en pensamientos que me dejan muy lejos de este lugar, en donde me haces sentir que hay aún más vida en la vida, aún más vida en un silencio. Si cierro los ojos me entrego sin vacilo a la idea de ser para ti, así que lo último que quiero es que estén abiertos
Lo que muestro de mis sentimientos poco a poco se hace insuficiente.
Te Quiero… ¿De qué otra manera se pueden decir las cosas?

sábado, 4 de febrero de 2012

...

No quiero escribir. No quiero plasmar lo que no es claro, no quiero plasmar lo que NO ES.
No quiero escribir, sólo quiero distraerme mirando la luna, siguiendo su recorrido.
No quiero hacerlo pero debo confesar que me hace falta un cuaderno.
Y las palabras sobran, sobran tanto que terminan siendo elevadas por el viento, las pierdo y por eso es que no escribo, porque no hay sobre qué hacerlo.
Por conformismo o por algo que falta en el ambiente.
Dentro de todo, no había nada que decir, una necesidad que no guarda razón.
No quiero escribir, pero tenía que escribir eso.




martes, 31 de enero de 2012

Como La Península Sin Bandera En La Que Me Siento Libre




Asuntos de simpleza e irrelevancia son los que poco a poco van formando la palabra felicidad.
Hoy me encargaré de no decepcionarme a mí misma, aunque no creo mucho que eso pase, todo lo que hago por éstas horas me está resultando realmente conveniente. Sin embargo, y con poco orgullo, debo aceptar que es una cuestión que se compone de muchos contribuyentes

¡Cuánto cariño le tengo a mis días que pasan y sólo me dejan la nostalgia de sus lindos momentos!
Le dan tanta vida a una piel que se mantiene esperando contacto. Le dan tanto movimiento a las torpes acciones del día a día. Hacen que la vida fluya ¡Y que lo haga de una forma muy dulce!

Los pequeños detalles ¿serán excusas? No lo creo. Tantas tonterías juntas resultan siendo un conjunto de magna importancia. Hay muchas cosas presentes que pasan sin ser vistas con los ojos de lo profundo, sentadas pasivas sobre minas de oro, presencias que tan ausentes, hacen de un todo algo perfectamente perfecto.

Llegaron las decisiones bien tomadas, cargadas de seguridad, ansiosas de conocer un futuro en el que resulten triunfantes. Cuán subestimada era el arte que estaba todos los días en mi cabeza (y más, en mi corazón) pero hoy fue el motivo de muchas, muchas risas.

Ya es mucho alarde y es preferible que la vida siga su rumbo tan amenazadoramente normal, yo con sonrisas disimuladas seguiré gritando por dentro, así me ahorro quedarme sin voz. Me conformaré entonces con lo que estoy sintiendo en este momento, no puedo hacer mucho por el ayer ni por el mañana.


¡Maldita Sea! ¡Soy Tan Feliz!




lunes, 23 de enero de 2012

Conmigo Ya No Intentes Nada, Parece Que El Amor Me Calma

Ahora estoy pensando si dejaré de lado lo que me prometí que nunca iba a hacer y caeré en las redes de lo prohibido... Prohibido por mí. ¿Puede ser tan malo? De igual forma creo que en algunas noches he escapado de los resguardos de mi subconsciente y me he entregado a lo que me inspira. Y me mantengo en mi posición, no la olvido: La inspiración es relativa. Pero ya aprendí que contra mis muy bizarros pensamientos repentinos no hay forma de luchar, así que aquí vamos.

Es asunto de reputación (MI significado de aquélla palabra), de palabras que se grabaron en mi mente con sólo ser vistas, de sonrisas escondidas, de días que no ven ni un vestigio de sombras y tampoco lo extrañan, de mis pies que quieren bailar y bailar cuando el resto de gente está quieta y aburrida esperando una hecatombe.

¡Qué divertido, qué confuso! Dejando que esto se haga a la manera que más me gusta, sólo me dejo entender a mí misma estas tantas palabras que hasta irritantes pueden resultar. Pocos ven el estado que tengo en este momento, muchos podrían imaginarlo, y es que la risa me invade y yo la invito a que nunca se vaya.

Analizaré eso de ser más permisiva con mis palabras, al parecer es entretenido dejar salir cualquier frase con poco sentido, con tan poco sentido como yo.

Si supieran, ¡Ay si supieran todo lo que se queda conmigo y no me afecta dejarlo ahí! Yo mientras me río sola. ¡Que sufran de curiosidad quiénes quieran enterarse, que sé que a ninguno de esos en realidad le interesa! A los otros... A los otros les basta.







La vida es bella ¿No? Sí ¡La vida es bella, bella!


viernes, 13 de enero de 2012

Muchas Ideas Muy Sueltas

Querer y sentirlo. Querer vivirlo.



Querer sin hacer caso al rumbo del destino.
Sentir cariño, querer. ¿Querer? Bueno, sí… Querer.



Querer sin luces ocultas, sin árboles frondosos tras los cuales se esconden las palpitaciones, sin baldes de agua fría que apagan el fuego. Sin tapujos, sin restricciones.



Porque querer sin creer, pierde sentido.



Querer sin perdonar. ¡Naah! Eso no se puede aceptar.



Querer… Querer sin saber si es amar.



Querer de forma insegura pero con el corazón en la mano, ni rastro de cobardía. Querer de forma segura pero… De forma segura.



Querer arriesgándose a perder. A perder apuestas, corazones. A perder la calma. ¡Exacto! A perder la calma.



Querer sin miedo a no rimar, a no encajar.


Querer y también sonreír, más dulce placer no puede existir.


Querer con monotonía, de forma fría, cuando una sola expresión sí sale del corazón.


Querer… Y que eso sea suficiente.



(¡Ja! Rimar sin la más mínima intención de rimar)

Diálogos Con La Ventana III






Recuerdo cuando eras una ventanota, una situación inversamente proporcional, yo era una niñita, tú una ventanota. No nos cambia la vida, nunca del todo, aquí estamos y no nos han separado, tampoco lo han intentado. Tal vez sea visible, de una forma sólo descifrable para locos como tú y yo, que nuestro vínculo trasciende, no es un simple reflejo que difuminan los rayos del sol.



La soledad hizo sus intentos de apropiarse de este espacio, tu espacio, nuestro espacio. En este largo recorrido la hemos visto irse y volver pero la música la ahuyentó miles de veces, mientras nuestras risas de complicidad la hacían sonrojar. Riéndonos separadas y de forma distinta, nunca supimos que nos burlábamos las dos de la tonta inquilina que pagó arriendo a corto plazo.



La ingenuidad también hizo su visita, pero a esa la quisimos, actuaba siempre de forma tierna, sin consciencia de los problemas, conmovedora con sus actitudes optimistas y risueñas, las sonrisas que ella provocaba, ¡Ésas sí que valían la pena! Se quedó tanto tiempo que nos acostumbramos, pero la música la ahuyentó, la volvió realista, madura; y se fue a hacer presencia a las salas de otro lugar. Su recuerdo aún lo guardamos, pero no sé dónde ventana, no sé dónde dentro de este desorden que juntas nos empeñamos en acumular.



El abandono hizo estragos, revolvió todo creyéndose el dueño y dejamos que lo fuera por un momento, borró el sonido de las risas, borró el color dorado de los cabellos de nuestras musas, borró la vida, borró la perfección; pero después de un tiempo de aguantar tiranía aprobada y polvo sobre su cara, la música lo ahuyentó y declaró a ese destierro, su mayor victoria hasta el día de hoy.



El amor llegó, nos unió más, la música… La música a él lo entusiasmó, pero se asustó y se fue sin despedirse.



Suspiros se oyen, profundos y colmados de inspiración.


Recuerdo cuando eras una ventanota, que no hablaba contigo, sólo te compartía miradas cómplices que servían como sello para marcar el comienzo y el final de una nueva historia que veíamos por separado, con perspectivas parecidas, que años después estamos relatando juntas.