lunes, 7 de noviembre de 2011

The Long And Winding Road




Hoy lo he decidido. Ya sé qué es lo que quiero lograr en mi vida. Quiero ser FUERTE. Sí. Ser fuerte. Creo que eso es lo que más necesito por estos días, días en que el invierno amenaza con irse cuando solo está tomando un descanso. Yo por mi parte estoy caminando todavía entre la nieve, el día que empecé a hacerlo me ilusionaba el hecho de hacer un recorrido por un sendero todo pintado de blanco, color de paz, lo que tanto necesitaba. Hoy, que no sé bien si estoy a punto de terminar o aún voy en mitad de camino, empiezo a sentir la fatiga de la baja temperatura, el cansancio que llega después de tener que hacer un doble esfuerzo en cada paso por tener que desenterrar ambos pies de la aglomeración de nieve. Mi pregunta es ¿Qué tienen que ver los vacíos en el corazón con todo esto?


Pero ya de muchas maneras la vida se ha encargado de decirme que nada valdrá la pena si no llego al final, que repito, no sé si esté lejos o cerca. Y es duro saber que quiero llegar pero los espejismos hacen presencia engañosos, haciéndome creer por instantes que parecen eternos, que no soy lo suficientemente FUERTE para hacerlo. Es por eso que hoy pido, tal vez a mí misma, a mi subconsciente, que tenga FORTALEZA, que los pasos arduos se verán recompensados y que nada, absolutamente nada, va a alejar de mi mente las imágenes hermosas que he tenido que ver mientras trato de llegar a mi meta.


No me quiero desconcentrar, porque cada vez que lo hago termino parada en la nieve sucia que ya pisé, pedazos de nieve que tienen la cara de aquellos cuya felicidad significa mi tristeza. FUERZA para gozar de la felicidad compartida.


No acabaré esto dándole una conclusión perfecta, diciendo que ya vi el final, que ya lo alcancé. El momento sigue sin llegar, por más que lo espere desesperadamente. Mi único objetivo al describir mi largo camino es gritar a los cuatro vientos que quiero ser FUERTE, aunque aún no me sienta así.


Continuará… Tal vez. Tal vez les cuente después en qué acabó esta nevada de confusiones.

jueves, 3 de noviembre de 2011

Well, There's Something Still Moves Me Inside

Vuelvo a los lugares recónditos de mi expresión, que abandonados un día, hoy (espero) se sienten importantes, tan importantes como para quitarse el polvo de encima. Recupero lo que aunque creado por mi mente, dejó de ser mío en algún momento.


Qué bonito es dejar de sentir cosas que hacen daño. No olvido el sentimiento fuerte, el que hizo vibrar al corazón de una manera desconocida, pero comienzo a dejar que el entendimiento de una realidad que puede ser buena a pesar de mi ceguera se apodere de mí.


Nunca fui buena para eso de conformarme con lo que tengo. No. Nunca. Para nada. Desagradecida podría ser el término que muchos utilicen para describirme en tal aspecto. Bueno, terminando con el “auto-ataque”, qué importa cuál sea el término exacto. Pareciera que por momentos me olvido de experiencias que viví, irreales, tan propias de un sueño y de películas perfectamente creadas a base de historias ficticias, cómo es que la vida puede llegar a confundir tanto a una inocente mente que piensa con su poco aguante.


Sentí miedo de las realidades dominantes… Luego me di cuenta de que dominaban en la nada, o tal vez no en la nada, sólo en el mundo de aquellos que no son ni siquiera desagradecidos sino inconscientes. Ver todo con una perspectiva distinta, desde un ángulo que permita ver casi a la perfección la variedad de realidades que están esperando a ser encontradas. Ésa es la gran experiencia de la vida. Una de las grandes experiencias de la vida.


Felicidad, no seas ingenua, no creas que ahora que por fin te tengo te voy a dejar ir.

martes, 1 de noviembre de 2011

Valentía

Es extraño ver como el mundo colapsa de un segundo a otro, en un instante repentino que cae como “balde de agua fría”, es más extraño (sin dejar atrás la palabra “confortador”) ver como esas súbitas circunstancias reúnen a las personas, es aún más extraño (sí, aún más), ser parte de todo eso, no poder salir ni querer hacerlo.

Han habido catástrofes mundiales que han conmocionado al mundo, no deja de impresionarme cuánta ayuda desinteresada puede recaudarse en tan poco tiempo, dejemos atrás los amarillismos e insensibilidades siempre presentes, la sociedad actual ha demostrado ser dadivosa, no todo es malo, el BIEN existe. Ahora esto ha pasado a ser un ensayo con características propias de un sermón.

Segundo intento, misma idea. Mil cosas pasan de las que todos se dan cuenta, todos, pero los silencios les ganan a las manifestaciones de pensamientos, no lo juzgo… Bueno, trato de no juzgarlo. Tal vez, el callar sea el medio por el cual algunos deciden revelar el estremecimiento de su interior, tal vez simplemente no tengan nada que decir y su cara, a pesar de no hacerlo directamente, muera por hablar. El sigilo es un arma de doble filo, es un dato que quizás deseen guardar en un rincón de su mente, que espero no esté llena de pensamientos fortuitos, como la mía.

De la vida se esperan muchas cosas pero que ridiculez es planear un destino cuándo sabemos perfectamente que todo aquello que pueda suceder es impredecible, no sé ustedes, pero mi pensamiento sostiene que existir no tendría ni una pizca de gracia si supiéramos que está escrito en las páginas futuras de nuestra historia, me gusta imaginar que todo está aún en blanco, y la tinta utópica que está en mi libro la amarro conmigo, de esa manera, soy la única artífice de todo lo que me traiga alegrías y consecuencias.

No sé si estoy confundida o no, eso aparentemente ya es una confusión. No. En realidad lo es. ¿Lo ven? Que enredo de cosas tengo por decir, pero retomando la idea de los pensamientos fortuitos que llevo conmigo, me retracto, espero que mi cabeza esté constantemente llena, llenísima de cosas en las cuales indagar, sin situaciones como ésta (como la vida misma) me sentiría vacía.

No me queda claro a quién va dirigido esto ¿Debería escribir “a quien interese” como en una cortés e importante carta?, supongo que lo verá y se tomará el tiempo para leerlo cualquiera que se sienta identificado o curioso. El ser humano ha superado sus propias barreras, ha sido capaz de crear la tecnología más alucinante, resguardada tras la pequeña pantalla de este ordenador, cuando dé clic a “enviar”, este ensayo estará al alcance del MUNDO ENTERO.


¡